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Inversión para construir el inmueble fue de 34 millones de pesos. Alcalde Eduardo Soto entregó además una subvención municipal para adquisición de equipamiento.
Una jornada que quedará en la historia de Villa La Ribera, fue la que se vivió el pasado martes, cuando el alcalde de Rancagua Eduardo Soto, en compañía de una gran cantidad de vecinos, inauguraron una nueva y flamante sede social para esta comunidad ubicada en el sector sur de la ciudad.
El inmueble, cuya construcción significó una inversión de 34 millones de pesos, viene a cumplir un anhelado sueño de los habitantes de esta villa, ya que fueron más de 15 años los que esperaron porque esta sede fuera una realidad.
Por tal motivo, el corte de cinta realizado por el edil y vecinos, fue celebrado en grande por la comunidad y en especial por el Presidente de la Junta de Vecinos, Sergio Vargas, quien no escatimó en elogios y agradecimientos para el alcalde Eduardo Soto.
“Este es un sueño hecho realidad. Estamos felices de ver nuestra sede. Agradecemos al alcalde por cumplirnos esto, que era lo que más queríamos como villa”, manifestó el dirigente.
En sus palabras el alcalde Eduardo Soto felicitó a los vecinos y comprometió todo el apoyo del municipio en la realización de actividades que desde hoy se podrán llevar a cabo en la nueva sede social, tales como talleres laborales, conformación de clubes deportivos y adultos mayores. Asimismo, hizo entrega de un cheque de 500 mil pesos de subvención municipal que permitirá adquirir equipamiento para el flamante inmueble.
“Es parte de un trabajo que hemos venido desarrollando como municipio y que consta de construir, mejorar, e invertir en infraestructura de uso público. Esta sede era un sentido anhelo de los vecinos que hoy estamos muy contentos de poder inaugurar”, sentenció.
La nueva sede social consta de un espacio de 86 metros cuadrados, salón multiuso, una oficina, cocina, baños para varones, damas y discapacitados. Además, su diseño consideró el levantamiento de un cierre perimetral, así como una rampa para minusválidos en su acceso.