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“Es impensado que un proyecto serio como es el compromiso de la presidenta no sea en la capital regional, pues Rancagua es la única ciudad que reúne todos los atributos para cobijar una universidad”, expresó recientemente el alcalde rancagüino Eduardo Soto, al justificar que su ciudad pida que la Universidad comprometida por la Presidenta Bachelet tenga la sede en la capital regional.
¿Rancagua es la única que reúne todos los atributos para cobijaar una universidad?
Y si así fuera, ¿por qué han fracasado todos los proyectos de Universidad establecidos en la capital regional?
Ejemplo: educares, Leonardo da Vinci, por nombrar solo a dos.
El alcalde Eduardo Soto tiene todo el derecho de soñar y luchar por tener la Universidad en su comuna, pero de ahí a argumentar que “es la única que reúne los atributos” es muy básico; como decir “Santiago lo tiene todo y las demás ciudades no tienen lo que yo tengo ..”.
Por otra parte, los ex alcaldes de Rancagua que han expresado su apoyo en los propósitos del alcalde rancagüino, es lo que menos pueden hacer ante la Universidad en vías de crearse.
San Fernando también ha expresado su interés en ser sede de esta Universidad “madre” en la región del Libertador O’Higgins.
¿Qué significan estos sueños, estos deseos de ambas ciudades?
Significa que ellos –aunque no lo dicen- están pensando que con toda la infraestructura construida y los millones que invirtió el Gobierno Regional “hagan un lulo” y se lo guarden en buena parte. ¿Verdad?
Y si esa infraestructura y miles de millones de pesos “sigue desvalorizándose” esas autoridades concertacionistas de entonces ¿no tienen ninguna responsabilidad en haber creado este elefante blanco?
Más aún, ¿y aquellos que boicotearon el intento de poner en funcionamiento esa infraestructura con la administración de la U. de Concepción, se la llevarán “pelá”?
Bueno señores autoridades, si están pensando en que “Rancagua tiene todo, reúne todos los atributos” (¿cuáles serán?). Y San Fernando dice algo parecido, ¿dónde está hoy el discurso de la descentralización?
¿O el tema es descentralizar a nivel país, para “concentrar” todo en las grandes ciudades de cada región. En la nuestra, Rancagua, San Fernando?
¿Por qué nuestra comuna, Pichilemu –capital de la provincia Cardenal Caro- no podría soñar con ser asiento de la Universidad Regional?
¿No tiene autoridades que piensen esta posibilidad, no están a la altura, no tienen la capacidad de soñar?
Aunque eventualmente podría ser así, pues no se ha oído una idea semejante hoy, no son ellos precisamente quienes estarían a cargo de hacer funcionar una Universidad, sino equipos de profesionales. Sí, los mismos que se requieren para que funcionen en cualquier lugar, independiente de quienes sean las autoridades.
Claro, tenemos que reconocer, que mientras ni siquiera tengan la mínima capacidad de expresar una intención en ese sentido, difícilmente quienes tienen que tomar decisiones, mirarán hacia nuestra comuna. ¿Pero no es hora de que lo hagan ya o estarán esperando que se lo sugieran las propias autoridades nacionales?
No obstante, la “pelotita” –por emplear un término mediático- está rebotando y hay que aprovechar de jugar con ella, tener capacidad de imaginar, de soñar.
¿Acaso no lo hicieron antes muchas ciudades del país? ¿Acaso no tenían los “atributos” (aunque no sabemos cuáles) que dice tener Rancagua?
Pichilemu tiene muchos lugares, muchos terrenos donde emplazar un Campus universitarios. Por cierto, no en el radio urbano, sino sectores aledaños donde esté emplazada, con amplios espacios, tranquilidad para estudiar, con y sin vista al mar.
Además, tiene muchos lugares –prácticamente todas las viviendas- podrían cobijar –como en otras ciudades- a los estudiantes que vendrían a estudiar a nuestra comuna. ¿Acaso sería diferente en la otra ciudad y/o comuna que sea elegida finalmente para que la Universidad Regional esté emplazada?
Todo lo que eventualmente falte, se irá creando, irá naciendo. “La necesidad crea el órgano”, como dice el antiguo aforismo popular.
¿No recuerdan acaso los chilenos, ese “aforismo inventado” en el instante por el recordado dirigente Carlos Dittborn que ante los ofrecimientos de oponentes a Chile y que “lo tenían todo” –como Rancagua- dijo: “Porque no tenemos nada, queremos hacerlo todo”.
Y tras esas palabras vino la votación para elegir la próxima sede del Mundial de fútbol, y Chile fue el elegido para la histórica cita mundialera del año 1962.
Pichilemu, al menos, tiene a “Chile en el corazón”.
Ahora nada más faltaría que nuestras autoridades comunales demuestren que saben hablar, que piensan. Que pueden organizarse y crear un movimiento en torno a esta “pelotita” que está ahí para que se juegue; pero en serio.
Un partido que también podrían jugar perfectamente las organizaciones de Pichilemu, las respectivas asociaciones gremiales: Cámara de Comercio, de Turismo, los sindicatos, entre muchas otras, ¿acaso no sería beneficiada la comuna entera, como la Provincia Cardenal Caro y la región en general?
Pichilemu sería en todo sentido, más beneficioso -¡y más atractivo!-para quienes vinieran a “estudiar” a un lugar que no tiene los niveles de contaminación de la capital regional. Al contrario, Pichilemu tiene “el aire impregnado de sales marinas, de pinos, de papayos, de greda”, tal como lo cantó el poeta y escritor de nuestra región y que reposa en nuestra tierra, José Vargas Badilla.