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Tecnología, un aliado para el emprendimiento

Editado por Gety Pavez Vidal
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 Utilizando diversas herramientas de hardware y software, y teniendo acceso a Internet desde un computador, smartphone o cualquier otro dispositivo, las personas pueden acceder hoy a un mundo de información, conocimientos y redes de contactos, todos factores determinantes a la hora de iniciar un negocio. 


Las tecnologías se han hecho cada día más accesibles. Sus precios han disminuido de manera exponencial y el acceso a ellas permite hoy nivelar las oportunidades tanto para hombres como para mujeres. Teniendo acceso a Internet desde un computador, smartphone o cualquier otro dispositivo habilitado para ello, las personas pueden ingresar a un mundo de información, conocimientos y redes de contactos, todos factores determinantes a la hora de emprender un negocio. 

Utilizando las tecnologías de información y comunicación (TIC), los emprendedores pueden hoy contar con una serie de herramientas de trabajo, desde un ERP o CRM gratis, hasta línea de teléfono fijo vía skype, herramientas de gestión de tareas en cloud computing y plataformas de crowdsourcing, entre otras.  

“Hoy, cuando alguien emprende un negocio, tiene acceso a información de sus clientes, productos y servicios. Pero también tiene acceso a herramientas para mejorar sus negocios, a otros países, contactos, medios de pago. Es decir, tiene una oportunidad de escalabilidad nunca antes vista”, dice Ángeles Undurraga, directora ejecutiva de Mujeres del Pacífico. 

Según la experta, “un emprendedor que hoy parte puede ser mucho más multifuncional, su oficina es su celular y es móvil, pudiendo atender su negocio desde cualquier lugar del mundo”. Y sentencia que el uso de TIC es tan importante, que quienes no aprovechen sus ventajas, “quedarán fuera del ecosistema de emprendimiento y nunca tendrán negocios masivos ni de alto impacto”. 

Ariel La Paz, profesor del Departamento de Control de Gestión y Sistemas de Información de la Universidad de Chile, sostiene que las TIC pueden ayudar en muchas formas y a diversos tipos de emprendimientos. 

“Para emprendedores que usan las TIC como medio de apoyo a sus negocios, un teléfono móvil, correo electrónico y portales web pueden ser suficientes como canales de venta y publicidad, sin necesitar de una tienda física para ello”, detalla el académico. 

“En tanto y a medida que nuestra economía se desarrolla en torno a los servicios, los emprendimientos dependen más del know how y del uso innovador y creativo de los recursos, por lo que aplicaciones computacionales combinadas con buenas ideas para mejorar procesos de producción o de toma de decisiones pueden resultar en emprendimientos rentables”, agrega.  

Para Rodrigo Malachías, gestor de alianzas estratégicas de Kibernum, una de las mayores ventajas que un emprendedor puede obtener de la tecnología es el acceso a la información, ya que con ella se puede “hacer crecer un negocio, conocer técnicas para captar clientes, lograr inversiones para el emprendimiento o realizar un benchmark con empresas de otros países sin grandes esfuerzos. Incluso,  se puede conversar y pedir ayuda a millones de personas en una plataforma de crowdsourcing”. 

Otros beneficios 
Además de las herramientas de conectividad, Claudio Müller, profesor adjunto de la Facultad de Economía y Negocios de la Universidad de Chile, indica que las TIC ofrecen otros beneficios a los emprendedores, entre ellos, “la colaboración en línea y el intercambio de ideas, algo que impulsa la internacionalización”.

Entre las TIC es posible encontrar además hardware y software de apoyo a las operaciones, como lectores de barra para el control de inventario o sistemas de registro y reporte contable, dice La Paz, de la misma casa de estudios.

De acuerdo a este académico, el uso apropiado de TIC para capturar y ordenar los procesos administrativos y generar ventajas competitivas es indispensable para el crecimiento. Y por ello, el empleo de estas herramientas será cada vez más indispensable a la hora de emprender. 

“El crecimiento entendido como expansión de las operaciones, ventas, número de clientes y rentabilidad, trae implícito el aumento en el volumen de transacciones, documentos, registros y datos que pueden convertirse en información útil. Muchas empresas nacientes que no logran este orden terminan estancadas o sobrepasadas por el costo de realizar procedimientos operativos de forma manual, restando tiempo a definir y trabajar en las estrategias del negocio”, asegura La Paz.

Por su parte, Malachías, de Kibernum, advierte que si bien la tecnología puede ayudar a los emprendedores a expandir sus negocios, “ésta no es el fin, sino el medio para hacerlo”. Por ello, recalca que es fundamental “no utilizar estas herramientas pensando que sólo con eso se alcanzará el éxito, ya que para crecer es igualmente importante estar preocupado de estructurar un buen modelo de negocios y trabajar constantemente”. 


 

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