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En total, fueron 37 los seleccionados en la región durante el segundo llamado especial de 2018. La entrega de beneficios se llevó a cabo en las dependencias del Servicio de Vivienda y Urbanización, SERVIU.
El Seremi de Vivienda y Urbanismo, Francisco Ravanal, junto al Director del SERVIU O’Higgins, Manuel Alfaro, compartieron un ameno desayuno con los beneficiarios del Subsidio de Arriendo para el Adulto Mayor. En la ocasión, 13 personas de Rancagua recibieron simbólicamente su beneficio.
“Este subsidio me va a ayudar mucho, porque voy a tener que trabajar mucho menos. Lamentablemente, a esta edad, una igual debe continuar trabajando para tener un mejor pasar y para los medicamentos. Por eso, estoy súper contenta ya que ahora sí podré juntar un ahorro previo para mi vivienda propia, y salir adelante con más facilidad. ¡Es muy bueno que se produzca esta ayuda, porque así no nos sentimos abandonados!”, indicó Graciela López.
Una opinión similar es la que tuvo Leonardo Toledo, quien también resultó seleccionado en este segundo llamado especial de 2018. “Fue una tremenda sorpresa. Yo en mis años de vida no había recibido nunca un beneficio de parte de algún Gobierno, y éste es un alivio económico, porque a algunos nos van a financiar hasta en un 95% el arriendo, lo encuentro espectacular. Nunca me imaginé que era tanto, por eso estoy muy agradecido por esta ayuda que hoy me están otorgando”.
En términos generales, el Subsidio de Arriendo para Adultos Mayores consiste en un aporte mensual que entrega el Estado para pagar parte de una renta de una vivienda, y se presenta como una solución para la tercera edad de bajos ingresos que no cuentan con una casa propia. En la región, fueron 37 las personas seleccionadas, pertenecientes a 16 comunas.
Al respecto, el Seremi Francisco Ravanal indicó que “el beneficio que estamos otorgando se enmarca dentro de las políticas habitacionales de nuestro Presidente Sebastián Piñera, de mejorar la calidad de vida de nuestros vecinos y vecinas. Es un subsidio que va dirigido a los adultos mayores, debido a que uno de los requisitos para su obtención es tener más de 60 años. Asimismo, el postulante debe pertenecer al 70% de la población más vulnerable, y contar con una pensión solidaria. Es sumamente importante recalcar que para postular a este beneficio no se requiere de un ahorro mínimo previo”.
En la misma línea, la máxima autoridad regional de Vivienda añadió que “este beneficio se les otorga a los seleccionados durante ocho años. En total, se les entrega entre 5 millones 600 mil pesos y 5 millones 900 mil pesos, esto dependiendo de su Registro Social de Hogares. Mensualmente, ellos reciben un monto cercano a los 220 mil pesos, y sólo tienen que complementar su arriendo con un monto equivalente a los 15 mil pesos”.
Por su parte, el Director del SERVIU Manuel Alfaro, realizó un llamado a los adultos mayores de la región a postular a este importante beneficio. “Les pedimos que se puedan acercar a la Oficina de Informaciones, Reclamos y Sugerencias (O.I.R.S.) nuestra para que se informen, ya que existen prerrequisitos que son bien establecidos y que deben cumplir como, por ejemplo, de quien les arrienda, porque no puede ser a un familiar”. Agregó Alfaro. “Nosotros queremos masificar este subsidio para que llegue a la mayor cantidad de adultos mayores de O’Higgins, ya que entendemos que efectivamente pueden tener problemas de desplazamiento, entonces vamos a hacer un trabajo en las diferentes delegaciones y oficinas del SERVIU, para que las personas de la tercera edad puedan optar y estar informados de este subsidio”.
De la totalidad de Subsidios de Arriendo para el adulto mayor que se entregaron a nivel nacional (más de mil), el 97% corresponde al tramo de mayor vulnerabilidad y 88% de ellos, vive solo. En este sentido, es importante destacar que el beneficio incluye asistencia técnica por un monto máximo de 3,5 UF para actividades referidas a la búsqueda de vivienda, apoyo en la firma de contrato, entre otras. Además, el programa permite a los adultos mayores que postulan sin núcleo familiar, volver a postular, dando así continuidad al beneficio.