Así fue informado hace algunos momentos por la Directora Regional de la Onemi, Alejandra Riquelme, luego que finalizara la reunión del Comité de Operaciones Emergencia que presidió el Intendente Patricio Rey.
El Intendente de la Región de O’Higgins, Patricio Rey Sommer, se reunió hace algunos
minutos con Comité de Operaciones de Emergencia, para analizar la información proporcionada por la Dirección Meteorológica de Chile y la Onemi, respecto a que la Región sufrirá un frente de mal tiempo por la presencia y paso de un sistema frontal, que afectará al país desde Coquimbo hasta el Biobío, comenzando este viernes 17 de junio y prolongándose hasta el lunes 20 de junio.
Producto de ello, la Directora Regional de Onemi, Alejandra Riquelme, informó que la Región se encuentra declarada a partir del día viernes 17 de junio, en alerta amarilla, ya que el sistema frontal podría registrar precipitaciones intensas en nuestra Región, con un total aproximado a los 110 mm. “Desde el día de mañana se establece alerta amarilla de manera de contar con los recursos operativos de los servicios públicos, como también el monitoreo y la vigilancia permanente de la Región frente a este escenario de riesgo. Esperamos precipitaciones intensas durante el sábado 18, del orden de los 40 a 50 milímetros, y el domingo de los 50 a 60, para declinar este frente de mal tiempo el día lunes 20 de este mes, con precipitaciones que serían aprox. de 10 mm.”.
Agregó que lo anterior estaría acompañado por marejadas en la zona costera y fuertes vientos, “por ello es fundamental el trabajo que realizará este Comité, para así articular una respuesta eficiente ante la posibilidad de ocurrencia de alguna situación de emergencia. Además, la Dirección Regional de ONEMI, a través de su Centro Regional de Alerta Temprana, mantiene coordinación permanente con los organismos regionales de protección civil, monitoreando el desarrollo de los diferentes eventos, de manera de gestionar los recursos necesarios para atender oportunamente las situaciones de emergencia establecidas en el Plan Regional de Emergencia, privilegiando el debido resguardo a la población”.
Asimismo, durante la reunión del Comité, se planteó que en consideración al pronóstico de precipitaciones entre las Regiones de Coquimbo y Biobío, éstas podrían generar arrastre de sedimentos y flujos de masa que pueden afectar caminos, obras de infraestructura y terrenos planos y bajos adyacentes a ríos y flujos superficiales, tanto en cordillera como en depresión intermedia y sectores costeros, pudiendo además provocar daños en viviendas con techumbres no preparadas, especialmente viviendas de adobe o viviendas de material ligero. Por lo anterior, se acordó monitorear en forma reforzada y sistemática el comportamiento dinámico y estructural de la zona comprometida, adoptando todas aquellas medidas preventivas que permitan reducir la vulnerabilidad y el riesgo a la población, en especial en las comunas donde están ubicadas las aldeas de emergencia, vale decir Rancagua, Rengo y Santa Cruz, que podrían verse afectadas por las altas precipitaciones.
