El desarrollo formativo técnico y profesional es una dinámica constante de adaptación a las necesidades de las empresas y al sector productivo, y que permitan responder efectivamente en áreas administrativas, técnicas, comerciales y operativas, por lo que egresados no sólo deben contar con la formación adecuada, sino que con las habilidades necesarias para resolver diversos desafíos empresariales donde se involucra la sustentabilidad, innovación y competitividad.