· El reconocimiento a la aplicación de buenas prácticas de humanización de las Unidades de Cuidados Intensivos (UCI) motivó que el hospital participara del programa internacional, para certificarse junto a Clínica Las Condes y Universidad de Los Andes.
160 estándares concretos implementados, entre otros requisitos, son los que el Proyecto de investigación “Humanizando los Cuidados Intensivos” (Hu-Ci) de la Fundación Humanizando la Sanidad (organización que busca cambiar el modelo de gestión en la atención, centrados en la dignidad de pacientes, familias y profesionales de la salud), está midiendo en los distintos centros de salud públicos y privados del mundo, uno de ellos, el Hospital Regional del Libertador O’Higgins (HRLBO). La idea es que el hospital se sume a una nómina de reconocimiento público internacional de establecimientos sanitarios que abrazan la mejora continua en virtud del bienestar, cumpliendo los requisitos necesarios para prestar una atención humanizada y de calidad al interior de sus Unidades de Cuidados Intensivos.
“Queremos ser garantes de humanización en nuestros cuidados intensivos”, expresa el Dr. Israel Lavady, jefe de la Unidad de Paciente Crítico (UPC) del Hospital Regional, ahondando, “nos invitaron a postular desde el proyecto HUCI a este programa junto a muchos hospitales y clínicas de América porque desarrollamos el manual de buenas prácticas de humanización de las Unidades de Cuidados Intensivos que ellos promueven, avanzamos las fases del proceso, lo que nos posicionó entre los 13 principales centros de salud americanos, que practican la humanización en sus UCI”.
“Somos el primer hospital público en Chile que accederá junto al sector privado a esta certificación, una vez que seamos sometidos a una última revisión de nuestro trabajo. Postulamos al nivel de excelente, uno de los grados más altos impuestos por el proyecto (básico, avanzado y excelente) que, para nuestra UPC, sustenta la labor que hemos venido desarrollando en la UCI desde hace tiempo por nuestros pacientes”, enfatiza el profesional del HRLBO, explicando, “las buenas prácticas, se refieren a mantener una UCI de puertas abiertas, con una infraestructura humanizada, con una comunicación fluida con el paciente, sus familiares y los equipos de salud a cargo, para velar por el bienestar tanto del enfermo, su entorno y los funcionarios, estrategias con las que trabajamos y que creemos que es la forma en que siempre debemos proceder”.
Alejandra Valencia, jefa del Departamento de Participación y Satisfacción Usuaria del hospital, con lo anterior señala, “acceder a la certificación es una gran oportunidad para ir mejorando nuestros estándares como institución. Esta es la instancia de hacer la UCI todavía más humanizada, tanto para la atención médica, como para todos los equipos de salud. Lograr la certificación es el primer paso para humanizar otros servicios en un futuro, como farmacia, el servicio de urgencia, entre otras más”
¿Qué motiva certificarse más allá de la distinción?
Lavady puntualiza, “hemos recibido a muchos de nuestros pacientes dados de alta de regreso en nuestras salas, visitando a nuestros funcionarios y recorriendo los lugares en que estuvieron hospitalizados. Cerca de un 100% de ellos han venido a agradecer nuestro trabajo, mostrándonos cómo ha sido su reinserción con la habitualidad, sus evoluciones, e incluso nos han traído hasta a sus bebés, porque han pasado tiempo con nosotros, sienten cercanía con los equipos, lo que nos motiva a querer acceder a la certificación, y nos valida en la buena aplicación de prácticas clínicas de trato humanizado”, subrayando que, “a través de esas muestras es que tenemos convicción de que podemos ofrecer a los usuarios, a la comunidad, un servicio de calidad centrado en el paciente, lo que incluye no solo el tratamiento de las patologías por las que vinieron, sino además el buen trato y posibilidades de que las familias participen del cuidado”.
La enfermera supervisora Sandra Tipán, por su parte finaliza que, “estamos trabajando desde antes por llegar a delinearnos como UCI humanizada, pero ahora especialmente trabajando por esta certificación, esperando que vengan desde la fundación a evaluarnos. Estamos contentos de participar en este proceso porque nos da opción de validarnos mundialmente”.