Proyecto Fondecyt Regular analizará el efecto del trabajo de los extensionistas en la productividad de los pequeños productores de las regiones del Maule, O’Higgins y Biobío.
Por primera vez se evaluará en forma científica el impacto de la asistencia técnica en la adopción de tecnologías y la productividad de los pequeños agricultores de tres regiones, gracias a un proyecto Fondecyt Regular que se acaba de adjudicar un equipo de investigadores de la Facultad de Ciencias Agrarias, encabezado por Roberto Jara.
El tema es una de las problemáticas que Roberto Jara, doctor en Ciencias Agrarias, viene abordando en torno a la economía de la producción de la pequeña agricultura. “Este proyecto en particular analizará el efecto de la asistencia técnica en la productividad y la adopción de nuevas tecnologías”, explicó.
Por tal motivo, el trabajo se focalizará en un programa de asistencia técnica en particular que el Instituto de Desarrollo Agropecuario (Indap), aplica desde los inicios de esta repartición y que se ha mantenido constante. “Queremos ver si la forma en que se está transfiriendo al productor tiene finalmente impacto en lo productivo, en los ingresos, especialmente de los pequeños agricultores que son más vulnerables”, dijo y agregó que si bien existen otros factores que influyen en ese aspecto, lo que se busca es asociar el efecto de la extensión.
Roberto Jara sostuvo que si bien se realizan mediciones ministeriales, probablemente estas son de carácter administrativo y se refieren, más bien, a si existe o no asistencia técnica, o a la cantidad de visitas del extensionista al campo, “pero desde el punto de vista científico no ha habido una medición con metodologías estadísticas y eso hace el proyecto súper novedoso. Como hipótesis creemos que efectivamente hay diferencias en la forma como se transfiere la información y queremos medir esas diferencias”.
Al mismo tiempo, precisó que el fin del proyecto no es evaluar un programa estatal, sino generar conocimiento sobre el problema planteado. Su idea es no solo tener como resultado un paper para cumplir con una exigencia de Conicyt sino, además, contribuir en el ámbito de la extensión de Indap, repartición que según el investigador siempre está abierta a entregar datos y a recibir retroalimentación.
El análisis comprenderá las regiones de O’Higgins, Maule y Biobío y considerará la intervención de las empresas extensionistas que trabajan con Indap. Este sistema privado, a su juicio, es un buen modelo de estudio porque las compañías se mantienen por años y asesoran a los mismos agricultores, lo que permitirá tener información de varias temporadas.
“Eso nos va a proporcionar variabilidad en el tiempo, en el espacio y en la extensión. Todo eso lo queremos capturar a través de modelos econométricos”, detalló.
La investigación se focalizará en berries, cultivos anuales y hortalizas. Además, se contempla realizar talleres y focus group con productores, en el contexto de lo que se denomina economía experimental.
En este proyecto participan también María Alejandra Engler, de la Facultad de Ciencias Agrarias, como co – investigadora; los colaboradores internacionales Boris Bravo, de la Universidad de Connecticut, Estados Unidos, y David Fleming, del Centro de Investigación en Economía y Políticas Públicas de Nueva Zelanda. También son parte del equipo la socióloga Carolina González y Vanessa Pacheco, tesista de doctorado.
Pie de foto: El investigador responsable del proyecto Roberto Jara.