Hoy en día la obesidad es una de los principales problemas de salud de los niños chilenos, según el MINSAL, Chile es el sexto país en el ranking de obesidad infantil a nivel internacional, es por ello que crear hábitos alimentarios y enviar colaciones saludables, es fundamental para mantener una dieta balanceada y el CESFAM Machalí, por medio de sus políticas internas, está constantemente previniendo a la comunidad.
La Nutricionista de Salud Machalí, Ivania Luengo, explica en qué consiste una colación saludable y cuando se deben injerir los alimentos, indicando “Una colación saludable consiste en entregar los nutrientes necesarios para el crecimiento y desarrollo de los niños, en horario escolar a pesar de que sean dos recreos, lo ideal es darles sólo una colación, además no se debe olvidar que si el estudiante está en su jornada académica completa, lo ideal es que pueda llevar una fruta para media tarde y así evitar excesos de comidas al término de clases”.
La Profesional también se refiere a las consecuencias de alimentarse poco saludable en el colegio, explicando “Comer de manera inadecuada puede generar algunas consecuencias como falta de concentración o mal humor, lo que puede condicionar el aprendizaje e influir en un mal rendimiento y falta de ánimo, conjuntamente se recomienda restringir aquellos alimentos que contienen un alto porcentaje de calorías, como lo son las grasas saturadas, los azúcares refinados y preparaciones con gran cantidad de sodio, como por ejemplo; papas fritas, sopaipillas, empanadas fritas de queso, berlinés, completos, chocolates, galletas, golosinas, jugos y bebidas”, alimentos que habitualmente se venden en los kioscos ubicados fuera o dentro del reciento educacional.
Finalmente la experta en nutrición, concluyó “El objetivo de prevenir a la comunidad con “tips” saludables no es dejar de comer calorías, ni atemorizar a la población, teniendo claro que la colación es sólo un alimento en el día, que ayuda a generar las energías necesarias para la jornada escolar, especialmente en los niños y adolescentes, lo importante es comer con conciencia e informados, un ejemplo claro son las etiquetas nutricionales, donde siempre hay que poner atención en la cantidad de calorías que los alimentos contienen”.