Fomentar estos espacios de encuentro es una de las tareas que ha trabajado el hospital a través de sus distintos programas. Marcia Barrera, Asistente Social del establecimiento y encargada de impartir este taller asegura que “las usuarias han podido construir redes de apoyo y lazos de amistad nuevos, lo que les permite apoyarse en aquellos momentos en los que se sienten más vulnerables”.
El taller de chocolatería comenzó el 2011, propuesto por el equipo de Salud Mental del Hospital, con el objetivo que cada una de las participantes pudieran aprender y compartir con otras usuarias, además de manejar algunas técnicas, como por ejemplo, la elaboración de chocolates, la que incluso a “muchas de ellas les permitió encontrar una fuente laboral o un ingreso económico extra al participar en estas clases”, comenta la Asistente Social.
Tan exitoso ha sido el taller que han incluido a niños que se controlan en el hospital por padecer déficit atencional. Al respecto Barrera, asegura ha sido gratificante ver a como los pacientes asumen nuevas tareas y como enfrentan desafíos con una mejor disposición.
Por su parte las alumnas del taller se mostraron contentas y muy satisfechas al poder presentar, ante el equipo médico y sus familiares, lo que han logrado gracias a estas clases, lo cual se ha convertido en un apoyo y les ha permitido superar episodios de depresión. Gracias a los buenos resultados, con el pasar del tiempo se han integrado nuevas pacientes, quienes motivadas por la experiencia aseguran esperar ansiosas por compartir cada semana.
En dicha ceremonia, el equipo de Salud Mental del hospital premió a quienes demostraron con su participación que es posible avanzar y con voluntad se pueden generar cambios importantes. “Las usuarias han construido lazos importantes de amistad y apoyo, pero principalmente hemos, gracias a estas instancias hemos reforzado su autoestima, algo fundamental en el caso de personas que están en una condición vulnerable”, finalizó la Asistente Social.