Fallo de Tribunal Oral de Santa Cruz
La Fiscalía de Santa Cruz acreditó en audiencia de juicio oral que un sujeto violó a su sobrina a penas 4 años de edad, en la comuna de Chépica, logrando su condena a siete años de cárcel por ese delito.
La indagatoria del caso estuvo a cargo de la fiscal especializada en delitos sexuales, Carmen Gloria Agurto, y se originó en una denuncia formulada por la Dirección Regional de la Junta Nacional de Jardines Infantiles (Junji) luego que la pequeña relatara a una de las tías del Jardín donde asistía que su tío “le había hecho algo con su pipí”.
Durante la investigación, iniciada en mayo de 2009, permitió establecer las circunstancias en que el imputado cometió el delito, lo que fue refrendado durante la audiencia de juicio, con el relato de la pequeña victima la que, a juicio del tribunal, si bien entrego un relato escueto y con limitaciones evidentes atribuibles a su edad, “fue suficientemente claro y preciso para describir el núcleo de la conducta sexual constitutiva del delito imputado, al declarar, en lo fundamental, que su tío le hizo una cochinada.”
Además de esta declaración, la fiscal Agurto aportó a los jueces sentenciadores María Angélica Mulatti Oyarzo, Patricio Acevedo Silva y Rodrigo Gómez Marambio la declaración de peritos, policías, médicos y psicólogos, que en el contexto de esta investigación y en virtud de su experticia establecieron el daño emocional y físico sufrido por la niña; tanto por el delito que la afectó, como por el desarraigo familiar derivado de su posterior internación en un hogar menores. Ello, por decisión del Tribunal de Familia, luego que los además adultos que vivían con la niña y estaban a su cuidado ejercieran presiones respecto de su versión a fin de evitar que el condenado fuera a la cárcel.
“La niña debió vivir, además de la dramática experiencia de haber sido víctima de un delito tan deleznable como el acreditado, por parte de alguien de su mismo entorno familiar a quien apreciaba, la separación de su familia y hogar, consecuencia no querida ni buscada por ella, viéndose enfrentada a sus pocos años al desamparo de todos quienes eran para ella en ese momento más cercanos” consignó la sentencia del Tribunal Oral de Santa Cruz.