Un 30% cayeron precios de ciruelas deshidratadas
– Mejorar la competitividad es vital en un momento donde la oferta es mayor a la demanda a nivel mundial.
Con una caída promedio de un 30 por ciento en su precio terminó el año 2009 la industria de la ciruela deshidratada, donde la Región de O’Higgins juega un papel fundamental considerando que es la mayor productora de este fruto en todo Chile (segundo país exportador después de Estados Unidos), con un 60 por ciento de participación en cuanto a superficie plantada.
Según el presidente del Comité Gestor del cluster Frutícola de la Agencia O’HIggins, Jesús de la Riva, el escenario se ha desarrollado con esta baja debido a que fue un año complejo por la crisis financiera, lo que hizo que los mercados se contrajeran en sus compras, respondiendo a un ajuste de adquirir lo justo y necesario por una menor capacidad de liquidez, “y eso hizo que las exportaciones salieran más lentas que en otros años”.
Indicó que de acuerdo a los datos que entrega ProChile y Odepa, es posible ver que en 2009 respecto de 2008, hubo una disminución promedio de un 30 por ciento en los precios, lo que tiene que ver con el total de dólares fob retornados, por el total del volumen exportado.
“Los precios dependen mucho de la calidad de los calibres o los tipos de calibre de la fruta que tiene cada productor, lo mismo que cuando se analizan las exportadoras, donde hay diferentes precios para los distintos formatos y diversas calidades de productos”, explicó.
El ingeniero en Agronegocios, sostuvo que en términos generales, esta caída ha repercutido en los precios pagados a cada productor, “donde encontramos un promedio que bordea los 90 centavos de dólar para una producción estándar de calibre” de esta zona.
PROYECCIÓN
El efecto de la crisis frenó el consumo en algunos mercados, pero si se considera que la economía global se está reactivando, “esto debiera comenzar a superarse, lo que no quita que por los stock y volúmenes que estamos alcanzando nosotros, Argentina, y la producción americana y francesa, se está generando una oferta mayor a la demanda, y por lo mismo hay mucho que trabajar”.
Esta, según De la Riva, es una de las tareas que debe desarrollarse a través del cluster Frutícola, con el propósito de buscar alternativas para el sector, como mejorar el retorno por el producto exportado, “y eso es agregar valor. Industrializar más nuestro producto, y en ese sentido, hoy tenemos una industria bastante más organizada que hace algunos años”.