Fundación Ayuda a la Iglesia que Sufre (AIS):

        - La capilla de emergencia se construyó en un terreno ubicado detrás de la antigua Parroquia Nuestra Señora del Rosario de Pumanque, para no interrumpir la próxima reconstrucción de este templo que se derrumbó con el terremoto de febrero pasado.

        -Esta es la tercera capilla de emergencia que se construye en el país. Ya se trabaja en la construcción de otros siete templos provisorios en la VI Región y de otros 30 en diversas localidades de las regiones VII, VIII y Metropolitana.
 

     El Presidente de la Conferencia Episcopal, Monseñor Alejandro Goic, bendijo hoy la nueva Iglesia de Pumanque, en la VI Región, que reemplazará transitoriamente la parroquia Nuestra Señora del Rosario de Pumanque que se derrumbó con el último terremoto. Este es el tercer templo que se construye en el marco de la campaña “Capillas de Emergencia: Reconstruyamos Chile con Cristo” que lleva adelante la Fundación Ayuda a la Iglesia que Sufre (AIS) para apoyar a las comunidades católicas del país que perdieron sus templos.
 

     Durante la ceremonia de bendición, Monseñor Goic destacó la iniciativa que lleva adelante AIS, ya que a su juicio “no sólo las casas de nuestro país deben ser reconstruidas, también nuestra fe. Al entregar estas capillas a comunidades afectadas se les está dando un refugio que les permite acercarse a Dios, abandonar en él sus preocupaciones e inquietudes, así como también celebrar sus sacramentos y dar testimonio del amor de Dios”.
 

     Por su parte, las Camareras de la Virgen del Carmen donaron a la comunidad de Pumanque una imagen de la Virgen, para que acompañe a los fieles mientras se restaura la imagen de su patrona, dañada por el último terremoto.
 

     María Covarrubias, miembro del directorio de AIS, detalló que “la primera etapa de esta campaña contempla la construcción de 40 capillas de emergencia en diferentes localidades de las regiones VI, VII, VIII y Metropolitana, cuyos templos fueron gravemente afectados por el terremoto. Sin embargo, la meta es construir un total de 55 capillas, por lo que aún se deben financiar 15 de ellas”.
 

     Actualmente, se trabaja en la construcción de otros siete templos provisorios en la VI Región, los que estarán situados en las comunas de, Auquinco, Rancagua, Olivar, Doñihue, Coinco, Malloa y San Vicente de Tagua Tagua.
 

     Esta nueva capilla de Pumanque hará posible que la comunidad local, compuesta por 1.600 fieles católicos, puedan volver a congregarse y celebrar sus sacramentos, tras haber perdido su parroquia. La capilla de emergencia se construyó en un terreno ubicado detrás de la antigua Parroquia Nuestra Señora del Rosario de Pumanque, para no interrumpir la próxima reconstrucción de este templo.
 

     Hasta ahora el párroco del lugar, José Vergara, ha debido celebrar misa en la casa parroquial, en una sala donde sólo caben 20 personas. “Abríamos las puertas y las ventanas para que los de afuera pudieran escuchar”, cuenta el sacerdote. Aún así, en oportunidades conseguían el comedor del Colegio de Pumanque para celebrar funerales o misas más congregadas.
 

La Parroquia Nuestra Señora del Rosario de Pumanque

     Erguida en 1824, esta parroquia lleva el nombre de la Patrona de Pumanque. La imagen de Nuestra Señora del Rosario fue traída desde el Cuzco por la dueña de la Hacienda Pumanque, Mariana Castillo viuda de Valenzuela y donada a Pumanque en el 1.800.

Esta imagen sufrió  daños en el terremoto del pasado 27 de febrero, por lo que hoy está  en proceso de restauración. Estará lista para celebrar la fiesta de Nuestra Señora del Rosario, el 7 de octubre.

Campaña  “Capillas de Emergencia: Reconstruyamos Chile con Cristo”:

     El proyecto de capillas de emergencia fue desarrollado por el arquitecto y consejero de AIS, Gonzalo Mardones y considera la construcción de una capilla básica, fácilmente montable. Cada capilla consta de una estructura de fierro con cubierta vinílica, resistente al agua, con una superficie de 185 metros cuadrados y capacidad para 100 personas sentadas. El valor de cada capilla instalada es de $10 millones.
 

     Actualmente, se calcula que más de un millón de chilenos católicos no tienen un lugar donde congregarse. De esa forma, las misas, bautizos e incluso funerales han debido celebrarse en la calle, ya que no siempre se dispone de un salón parroquial apropiado para adaptarlo como capilla provisoria. Del catastro preliminar informado por las diócesis más afectadas, se contabilizan 545 recintos religiosos dañados, de los cuales 440 corresponden a templos.

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