Si estás embarazada y te interesa comenzar una dieta saludable, Claudio Vega Meneses, Jefe de Carrera Gastronomía Internacional de AIEP, te da ideas para que sepas qué comer y cómo preparar tus comidas.
• Adiós Fat Food: es toda la comida que aporta más grasas que nutrientes, así que las hamburguesas están prohibidas, además que tienen componentes que no son buenos para tu salud.
• El queso azul es una delicia, pero debes dejarlo de lado junto con todos los que no estén pasteurizados, ya que pueden tener listeria monocytogenes, bacteria que provoca la listeriosis, enfermedad que causa infecciones sanguíneas, meningitis y otras serias complicaciones, que pueden ser incluso mortales. Mejor busca otros quesos como el cheddar, edam, mozzarella o parmesano que son más recomendables.
• En la cocina los huevos siempre debieran ser lavados, pero no muchos lo hacen. Esto debe ser un hábito para ti, ya que podrías contagiarte de salmonella, bacteria que provoca graves problemas al tracto digestivo, así es que no importa si son de marcas conocidas o de campo, debes limpiarlos y cocinarlos bien antes de utilizarlos.
• Una mujer debe consumir entre 1800 a 2.000 calorías diarias, dependiendo de su estructura ósea y aumentar entre 200 y 300 su ingesta cuando está embarazada. Por eso debes elegir bien los alimentos para no pasarte, una barra de chocolate puede ser deliciosa pero no aporta nutrientes, no da sensación de saciedad y por último te consume gran parte de las calorías que correspondían a ese día. Opta por verduras, frutos secos y alimentos que sean nutritivos, ideal que no te sumen grasa.
• Frutas: se recomienda entre 2 o 4 porciones al día (una taza), las puedes ingerir en un jugo natural por la mañana, la naranja y el pomelo aportarán vitamina C. Tutti fruti o gelatina con fruta picada en la colación de la media mañana o de la tarde también son buenas opciones.
• Carne: olvídate de los cruditos y el carpaccio, estos alimentos deben estar bien cocidos. Lo recomendable es de 2 a 3 raciones, puede ser un filete de carne roja, pollo, pescado o bien dos huevos de la forma en que más te guste prepararlos, esta es la mejor manera de obtener proteínas.
• Pescados: Hay algunos peses que contienen mercurio, un metal con el que hay que tener precaución porque se cree que puede afectar el desarrollo del feto. La Agencia de Alimentos y Fármacos de Estados Unidos recomienda limitar el consumo de atún y otros pescados a unos 12 300 gramos.
• Ácido Fólico: lo encuentras en alimentos como las lentejas, los garbanzos, espinacas y espárragos, de esta manera las sopas y cremas naturales se convierten en tus aliados.
• Cereales: lo correcto es comer entre 6 y 11 raciones diarias, eso quiere decir una rebanada de pan con mermelada o miel o 150 gramos de cereal con leche o yogurt.
• Bebidas alcohólicas: No es recomendable su ingesta pues el alcohol tiene consecuencias serias para la salud del bebé, tales como defectos físicos, problemas de aprendizaje y problemas emocionales.
• Dulces: Está permitido, en ocasiones especiales, comer alimentos con azúcar como los postres y galletitas. No le hará daño al bebe si es de vez en cuendo.
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